Hace tiempo que se debate acerca de lo que implicaría la implementación de medidas electrónicas en la democracia: beneficios, cambios y peligros. Sin embargo, el proceso avanza en paralelo al debate. Así, en las últimas Elecciones Generales en España, en diversos Colegios Electorales de la Comunidad de Madrid se emplearon ordenadores para ayudar en el recuento de votos, el control de incoherencias, etc. Y resultó ser una herramienta muy útil para el buen funcionamiento de esas mesas electorales. En el caso español, la legislación no permite ir más allá. Pero en Estados Unidos, por ejemplo, existen Estados donde se permite votar directamente de modo electrónico en unos cajeros específicos.
Esto facilita el hecho de que no sólo se pueda votar sobre los candidatos a Gobernadores u otros cargos, sino sobre numerosas otras decisiones que afectan a la comunidad. Además, permite la personalización de la interfaz, por ejemplo para elegir el idioma, facilitando así la votación a comunidades con distintas lenguas. Y más cosas.