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Crítica de Serie: The Newsroom

Aron Sorkin, creador de El Ala Oeste de la Casa Blanca entre otras obras, vuelve a ofrecernos un muy lúcido y complejo análisis de una de las dimensiones centrales de la sociedad actual. Si en aquella se centraba en el primer poder de una sociedad, el político, en la que ahora nos ocupa se centra en el cuarto: los medios de comunicación. Personajes sólidos, diálogos brillantes y un claro entendimiento del funcionamiento de los medios permite así construir un cuadro complejo acerca de su funcionamiento, el papel de los mismos en la sociedad, sus deberes y responsabilidades, problemas y virtudes.

En este caso, probablemente lo que más interese sea el conflicto presente a lo largo de la serie, entre el deber hacer de los medios de comunicación (su deber de informar) y su deber hacer como empresas (osea, su deber de tener beneficios económicos). Esto se traduce en la pugna entre los ratings de audiencia, la publicidad contratada y la línea editorial y analítica del programa. En cierta medida, refleja el mismo conflicto que The Wire retrata cuando muestra el terrible impacto que las estadísticas tienen en el buen trabajo policial. En The Newsroom se muestra en gran medida en la necesidad de crear entretenimiento incluso con las noticias y los debates en torno a ello, especialmente porque se lo contrapone con los medios de información que son puro entretenimiento (tabloides, prensa rosa, etc.).

Aquí, ese conflicto se ve precisamente tintado por el impacto social y político que, públicamente, hacen los medios de comunicación en la realidad social del momento. Conflicto que se ve destacado por el hecho de que su narrativa no ocurre en “un mundo paralelo” como ocurría en El Ala Oeste, sino que se basa en las noticias y eventos reales que han ocurrido desde 2010. Así, no sólo muestra el trabajo en torno a la creación y puesta en práctica de la noticia, sino que ofrece también un lúcido análisis de eventos pasados pero suficientemente recientes como para tener importancia en la actualidad (el ascenso del Tea Party, por ejemplo).

En resumen, una serie que ofrece una mirada intensa, profunda y compleja sobre la realidad actual política, mediática y social de los Estados Unidos y, con ella, de la sociedad occidental en general. Realmente recomendable.

Costán Sequeiros Bruna

Y tú, ¿qué opinas de esta serie?

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