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Reflexiones personales

La universidad española está anticuada

universidadEl post de hoy probablemente no sea del interés de muchos, pero es un tema importante igualmente. El sistema educativo español, y el de buena parte del mundo, se basa no en la originalidad sino en la copia. Así, no se premia que un alumno entienda un tema y desarrolle su propio pensamiento al respecto, sino que aprenda de memoria listas de reyes godos, fechas, fórmulas…

Sin embargo, el modelo basado en la memoria es un modelo obsoleto. Tenía su sentido hace siglos, cuando el acceso a los libros era complicado y por tanto había que conocer las cosas de memoria para poder emplearlas. Pero vivimos en una época donde el acceso a la información es inmediato en buena parte del mundo gracias a internet, por lo que la memoria ya no es necesaria como antes. Al contrario, en un mundo donde lo más valioso es la capacidad de generar conocimiento nuevo (patentes, inventos, etc.) lo que importa es aprender a pensar, a conectar conceptos, a innovar.

El pensamiento crítico se vuelve central para que la educación sea útil en estos tiempos, especialmente en la universidad. Pero el pensamiento crítico es incómodo a las élites porque enseña a la gente a pensar por sí misma y eso es peligroso. Si juntamos esto con un modelo obsoleto y con las enormes inercias (que diría Becker) que tiene la universidad desde hace siglos, el resultado es que no está adaptada al siglo XXI ni de lejos, y castiga lo que debería recompensar.

Se supone que todo el sistema académico/científico ha cambiado, al menos la parte social que es la que más conozco. Que valora las aportaciones originales, los textos innovadores, etc. Y, sin embargo, la realidad es que los temarios de muchas asignaturas, el funcionamiento del sistema de publicaciones y demás lo que hacen es perpetuar las mismas cosas de siempre. Los temarios de teoría sociológica contemporánea, por ejemplo, suelen llegar solo a las teorías de los años 70, dejando que cada uno aprenda por su cuenta todo lo que viene después, que justo son las investigaciones y teorías más punteras que se espera que se usen porque han rebatido o refinado las teorías anteriores.

Esto se debe en buena medida a que los profesores no tienen ningún incentivo a la hora de mantenerse al día con las investigaciones actuales, una vez han obtenido la plaza de titulares en la universidad. Como buenos funcionarios, son básicamente intocables en muchos sentidos, de modo que no les vale la pena el esfuerzo de seguir estudiando y aprendiendo, añadiendo y mejorando los temarios que imparten. Aunque, a fuer de ser sinceros, tampoco es culpa suya únicamente, ya que con todos los recortes buena parte de los docentes universitarios se encuentran saturados de horas de clases a impartir, lo cual les deja muy poco tiempo para investigar o continuar estudiando.

Por su parte, el sistema de publicaciones se basa en citar todo el rato otros autores para que se sostenga un artículo, dejando un espacio prácticamente nulo para el pensamiento original del autor del mismo. Entre el contexto, las referencias previas y los límites de extensión de las diversas secciones de las revistas científicas, a menudo todo el resquicio que queda para una opinión original son las conclusiones. Pero supongo que da igual, al fin y al cabo para que tengas una idea propia se espera que tengas 50 años de trabajo a tus espaldas a base de citar otros autores, hasta entonces a trabajar sobre lo que otros han hecho antes.

Ojo, no estoy en contra de conocer y manejar bien a los clásicos, o citar a otros que han trabajado en el mismo ámbito antes. Al contrario, creo que eso es básico para hacer ciencia de calidad. Pero el problema es que el sistema español se ha anquilosado en eso de modo que prácticamente todo lo que sale son refritos de teorías de otra gente mientras otros espacios, como la universidad americana, se arriesgan mucho más y aceptan muchos trabajos distintos. Lo cual se agrava al tener en cuenta que cada vez hay menos revistas científicas porque los trabajos de edición y revisión en las mismas no puntúa apenas ni se remunera, lo cual hace que las que queden estén saturadas de las firmas de gente importante y artículos seguros sobre cuestiones a menudo muy tratadas.

universidadEl resultado es que la universidad española se encuentra a la cola de muchas otras en cantidad de citas o en impacto global de sus campus. Es lógico, desgraciadamente no aporta mucho novedoso al resto del mundo. Y la innovación, en la era de la información, es la parte central de la mayor parte de los sistemas sociales. Así, el ranking de QS solo incluye tres universidades españolas entre las 200 mejores del mundo, y el ranking de Shanghai no incluye ninguna.

Y con el talento, la capacidad de trabajo y análisis que me he encontrado en mucha gente joven, sin duda es un desperdicio. No hace falta ser catedrático para tener un buen análisis o una idea novedosa, al fin y al cabo. Y, sin embargo, a menudo parece que se es el caso. Al menos en sociología, que es lo que más conozco.

Así no me extraña  que buena parte del mejor talento que generamos en España acabe trabajando fuera, donde a menudo es muy bien recibido por empresas y universidades. Y eso sin entrar en otras cuestiones que lo potencian como los recortes en educación, la ANECA, etc. que inevitablemente animan a la emigración y dificultan cualquier posibilidad de renovar nuestra academia en ideas y en gente.

Tenemos una universidad del siglo XX (¡o XIX incluso!) que de algún modo debe actualizarse al XXI pero parece que en vez de avanzar retrocede. Y cada vez parece más difícil ser capaz de dar la vuelta a ese proceso.

Costan arqueros Bruna

Y tú, que opinas al respecto?

PD: muchísimas gracias a Hector Puente por las numerosas conversaciones e ideas que han ayudado a dar forma a este post.

One reply on “La universidad española está anticuada”

Está anticuada y es un pozo de mamadores del dinero público que tanto cuesta ganar a los españoles.

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