Categories
Reflexiones personales

Cortinas de humo y opinión pública

El Roto y las cortinas de humo

A lo largo de un día cualquiera, en el mundo se producen infinidad de noticias: eventos políticos, cambios económicos, noticias deportivas, de moda, climatológicas, sucesos locales, reuniones internacioneles, eventos musicales… y la lista podría seguir de modo indefinido. Sin embargo, de todos estos eventos que ocurren, a nosotros solo nos llega una fracción mínima, al pasar por un doble filtrado: el de nuestros círculos de información personales y el de los medios de comunicación (especialmente los de masas, como la prensa o las noticias de televisión).

Estos dos filtros reducen las miles de noticias que ocurren, a una cantidad pequeña y digerible que se supone que nos es relevante. Esto sobrerrepresenta cierto tipo de información (eventos locales o sobre los grupos en los que estamos involucrados) y deja otra parte en la sombra. Con lo cual mi opinión del mundo, al pasar por estos dos filtros, está enormemente sesgada.

Si ampliamos esto en escala, lo que tenemos es que como esos dos filtros se aplican a todo el mundo, la opinión de todas las personas está sesgada. El resultado es que, quien controla el sesgo (tradicionalmente, los medios de comunicación, la escuela, etc.) condiciona lo que la opinión pública piensa o siente en un determinado momento.

Pero los medios de comunicación no son solo creadores de opinión, sino que también son creados por la opinión de sus lectores, en un bucle que se retroalimenta: como este periódico es de izquierdas, lo lee la gente de izquierdas, de modo que el periódico mantiene esa línea editorial para no perder a sus lectores, que por tanto siguen recibiendo una información de izquierdas, etc. Añadid a eso que, como ese perfil de lectores tiene ciertas características, los anunciantes que quieran aparecer en ese periódico son los que tienen a ese público como su cliente principal, y a través de estos anunciantes se financia el medio de comunicación, dando un bucle más complejo de retroalimentación pero igualmente innegable.

Ahora es cuando llegamos a las cortinas de humo. Una cortina de humo es un evento que se usa para ocultar otro evento, llamando la atención sobre el primero para disimular el segundo. Como los trucos de un mago, que te hace mirar a un sitio mientras el truco en realidad está teniendo lugar en otro. Es un evento muy empleado en política, cuando ocurren cosas de gravedad.

Un ejemplo clásico de esto: cuando estalló el caso Lewinsky durante la administración de Clinton en Estados Unidos, la opinión pública durante mucho tiempo se centró en eso… cosa que el gobierno aprovechó para lanzar la mayor cantidad de bombas y misiles que lanzaría durante toda la Guerra de los Balcanes. Este es un ejemplo clásico de cortina de humo: la opinión mira a un sitio, de modo que podemos hacer cosas graves en otro que pasarán desapercibidas.

Esto se debe a que la opinión pública, a través de los medios de información, funciona en ciclos. Surge una noticia, tiene gran repercusión durante un tiempo y luego desaparece. Por ejemplo, la muerte del niño en el fondo del pozo es sin duda una tragedia familiar, pero a nivel social en realidad no es noticia. O no debería serlo, más allá del morbo o la curiosidad del espectador. En España, en 2017 murieron 424.523 personas de todo tipo y en toda clase de situaciones… la muerte de un niño, por trágica que sea, no es significativa a ningún nivel.

Y, sin embargo, durante días, los medios de comunicación han estado bombardeando con ello, con cada pequeña novedad o falta de la misma. Y este evento, oculta otros que son sin embargo más importantes, como la cantidad de gente que muere en el Mediterráneo ahora que la mayoría de países europeos controlan y limitan la posibilidad de rescates en el mar. Es una cortina de humo perfecta para ello.

O cuando los medios de comunicación se ceban con eventos ajenos, a menudo con interpretaciones muy sesgadas, como con Venezuela como modo de distraer la atención sobre otras cosas. Un ejemplo muy típico: durante buena parte de la peor etapa de recortes que ha habido en España, llena además de casos destapándose de corrupción, uno de los temas principales de discusión no era la bajada en sanidad sino si Cataluña se independizaba o no. Una cortina de humo perfecta, sin duda, porque buena parte de la población tiene sentimientos muy fuertes sobre esa cuestión y además fue un proceso muy largo, permitiendo que numerosas cuestiones más graves y que nos afectan a todos pasasen desapercibidas.

En política, y la configuración de la opinión pública es buena parte del centro de la política en las democracias, a menudo las cosas no son lo que parecen. Como ocurre con el mago, lo que se lanza a la arena de discusión sirve a menudo a ciertos intereses que buscan efectos: pueden querer exaltar una opinión para movilizar a su electorado, por ejemplo, u ocultar eventos para poder actuar con impunidad.

Con esto no quiero decir que los medios de comunicación sean herramientas del poder político (que sin duda lo son a menudo, especialmente la televisión pública, cuando no actúan como deberían como contrapeso), sino que el poder político aprovecha los juegos de la opinión pública a su favor. De modo que cuando alguien quiere llamar mucho la atención sobre una noticia, es importante pararse a pensar varias cosas: ¿a quien beneficia que se hable de esto? ¿De qué no se está hablando porque la conversación gire sobre este tema? Y, sobretodo, ¿es esto realmente importante a nivel social, o simplemente un suceso más en la historia que nadie recordará en tres semanas? Y, si las respuestas a estas preguntas no son satisfactorias, tened cuidado porque es probable que la noticia sea una cortina de humo en manos de quienes hacen prestidigitación política.

Al final, como suele ser el caso, es necesario tener un pensamiento crítico propio a la hora de juzgar lo que leemos y separar los hechos de lo que quieren conseguir en nosotros quienes los han elaborado.

Costán Sequeiros Bruna

Y tú, ¿qué opinas de las cortinas de humo en los medios de comunicación?

2 replies on “Cortinas de humo y opinión pública”

Muy acertado el discurso sobre la formacion de la opinion publica y los sesgos que utiliza.
Usando noticias no relevantes socialmente u otras piliticas para tapar una situacion mas grave.
Y q el mass media nunca es pasivo.

En efecto, sin duda nunca lo es. Como todo agente en sociedad, los medios de comunicación también tienen sus intereses y agendas. Y eso cuando no están siguiendo (conscientemente o no) las agendas de otros.

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.