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Reflexiones personales

La Identidad es Superficial y Banal

Hay un viejo dicho árabe que dice algo parecido a esto: “yo contra mi hermano; mi hermano y yo contra mi primo; mi hermano, mi primo y yo contra mi vecino; mi pueblo contra él de al lado…” Os hacéis una idea.

Este concepto se basa en el “nosotros” y el “ellos”, la identidad grupal. Es obvio que nosotros puede ser “los españoles” si se compara con “los franceses”; pero la identidad puede ser mucho más complicada, y basarse en conceptos mucho menos claros, menos firmes e, incluso, menos lógicos porque todos necesitamos pertenecer a un grupo.

De hecho, existe un viejo experimento en psicología social que consiste en llevar a una serie de personas a ver juntas una obra de arte. Pronto aparecerá gente a la que le guste esa obra, y gente a la que no, y se formarán así dos grupos. Pues resulta que esos grupos se defenderán como unidades, incluso en temas que no tienen nada que ver con la obra de arte en cuestión, ya que la identidad grupal que han generado es más importante a menudo que esas cuestiones (obviamente, dependerá de lo fuerte o relevante que sea para ellos el tema tratado, ya que la identidad grupal “gente que le gusta este cuadro” es bastante más débil que otras como la nacionalista, o la de un equipo de fútbol…).

Es obvio, por ejemplo, cómo la ropa marca con quien te relacionas, cómo y por qué. Así, las subculturas adolescentes son un caso paradójico de esto, ya que no sólo se diferencian en lo hacen, en su popularidad y en su forma de pensar, sino que también buscan claramente formas de distinguirse de las demás en su forma de vestir. Pero esto no sólo ocurre con los adolescentes. Os pondré un ejemplo paradójico y sorprendente.

En los extras de “Babylon 5: The Lost Tales, el director Joe M. Straczynski encuentra un fenómeno sorprendente. En esa historia, existen dos razas muy concretas, los Narn y los Centauri, que son razas enemigas desde antaño, con guerras entre ellas y todo eso. Pues bien, el director observó durante el rodaje de la serie Babylon 5 que los extras de cada una de las razas comían juntos: los Narn comían juntos, y los Centauri comían juntos. Pero separados de los de las demás razas. Así que dijo que a un extra Narn le diesen al día siguiente un papel de extra Centauri y observó lo que pasaba. Lo que ocurrió fue que ese día fue a comer con sus compañeros Narn pero vestido de Centauri, y existió un ambiente enrarecido, extraño, incómodo; al dia siguiente, ese extra comió con los Centauri.

¿Por qué? ¿Por qué genera identidad una cosa tan supérflua y alejada de nosotros como la ropa que usas durante el rodaje de una serie? Son personajes de ficción, al fin y al cabo, no te puedes sentir identificado con ellos. No puedes “sentirte Centauri” porque los Centauri no existen. Y aún así la gente lo hace, y con un grado de fuerza sorprendente incluso con elementos tan superficiales. Por muy profundos y sabios que nos creamos, nos vemos forzados a aceptar que la moda y la ropa marcan nuestra percepción de los demás y nuestra aceptación de ellos. Y, con ello, la forma en que nos relacionamos con ellos, actuamos con ellos y los prejuicios que de ellos tenemos.

Quizás, si la mona se vista de seda, deje de ser mona al fin y al cabo.

Costán Sequeiros Bruna

Y tú, ¿qué opinas de ello?

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