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Reflexiones personales

¿Cuántas Clases Sociales Hay?

El tema de las clases sociales y la desigualdad dentro de la sociedad es uno de los temas clásicos de las ciencias sociales y la sociología, y uno que ha evolucionado mucho con el tiempo. Así que vamos a echarle un vistazo, empezando el argumento en la Edad Media. Como sabemos, en el siglo X existían básicamente tres clases sociales o estamentos: el clero, la nobleza,  y el campesinado. Si avanzamos los siglos, a finales de la Edad Media comienza a establecerse la cuarta clase, fruto del crecimiento en importancia de las ciudades como núcleos de comercio: llegaba la era de la burguesía.

Esta burguesía fue la clave del cambio, a medida que las clases de nobleja baja desaparecían absorbidas por los crecientes espacios de la burguesía comercial y el capitalismo. También subían en riqueza y desigualdad las posiciones de la alta nobleza, cada vez con más poder en sus manos. Seguimos así, de este modo, hasta llegar a la Revolución Industrial, momento en que la burguesía finalmente comienza a desplazar de modo claro a la nobleza, especialmente en los países que realizaban sus transiciones a la democracia.

Llegamos así a la época de Marx y la división entre proletariado y dueños de los medios de producción. Pero ojo, ya en esta época Marx dice que esta es la línea principal de división y las dos principales clases, pero no las dos únicas. Así, señala que existe un lumpen proletariado por debajo del proletariado, y un cuerpo de funcionarios que no son dueños de ningún medio de producción pero si llevan vidas acomodadas. Por tanto, en tiempos de la Revolución Industrial ya han surgido una serie mayor de clases, cada una con sus propias condiciones y relaciones con los capitales y el poder.

Pero, con toda esta vuelta, ¿a dónde llegamos? Al día de hoy. El proceso ha continuado, desde luego, a medida que el capitalismo continúa aumentando la brecha entre ricos y pobres, pero también todos los niveles en el medio. Gracias a los tiempos de bonanza y de proteccionismo de los 50 y 60 y al establecimiento del Estado de Bienestar, las clases medias (en plural) han crecido en cantidad y diversidad.

Lo cual nos lleva a un mundo donde la división de Marx ya no se aplica. El dueño de una pequeña empresa de fabricación de zapatos es dueño de sus medios de producción, y en cambio el gran ejecutivo de una firma internacional no lo es. Y, sin embargo, ¿cual de los dos mueve más dinero? Efectivamente.

En el mundo actual, las clases se miden en poder, en este caso poder económico. Pero el poder económico no sólo se mide en propiedades, se mide en acciones, en ingresos del trabajo, en rentas… Sin embargo, esto no es lo único que determina las posibilidades económicas de una persona: nivel de estudios, redes de contactos, acceso a información privilegiada, protección/asesoriamento legal,… Y, desde luego, el grado de globalización y acceso a los medios globales de producción de riqueza.

Todo esto, y más, es lo que diferencia las clases hoy en día y, habiendo tantas variables, lo que corresponde es saber que hay una infinidad de clases sociales. Por lo cual, lo que se crea ya no son clases claras, sino un espectro de posiciones donde la movilidad es más abierta en algunos sentidos, y más cerrada en otros, y donde existen tantas posiciones intermedias como se han alejado los extremos. Porque, desde luego, los ricos son mucho más ricos de lo que jamás han sido, en relación con los pobres. Así pues, hay muchas clases medias con distintos niveles de riqueza económica, política, intelectual, etc. Igual que hay variedad entre distintos tipos de ricos con riqueza de producción, con conocimientos valiosos, con redes de contactos que vender, etc. Y pobres que, bueno, lamentablemente carecen de todo ello.

Esto tiene un corolario muy importante con el poder. Como reza el dicho, “divide y vencerás”, y con tantas clases la población está más dividida que nunca. La gente ya no considera las luchas de otros necesariamente las suyas, y no consideran que cuando unos se movilicen en defensa de sus derechos, los de ellos también estén siendo amenazados. Hoy, la clase de cada uno la componen él y aquellos pocos muy semejantes a él en todos los términos, lo cual fracciona cualquier lucha y posibilidad de generar unión. Ya no hay clase de si, que diría Marx, mucho menos clase para si.

Y, con ello llegamos a la respuesta a la pregunta que nombra este post, hoy en día hay una infinidad de clases, muchísimas, innumerables, según dónde cada uno ponga los límites en ese continuo.

El poder, huelga decirlo, está encantado con esta situación. La clase económica ha desaparecido como la brecha definitoria de quien es cada uno en la sociedad, sino que ahora se une a la ideología política, a los intereses, a la zona dónde uno vive, etc. Y muchos grupos dispersos y sin conciencia de unión son siempre más fáciles de manejar.

La sociedad civil está tratando de buscar formas de combatir esto, construyendo organizaciones y asociaciones ciudadanas para cada problema, al margen de las cuestiones adicionales. Para ser ecologista importa la conciencia ecologista, no para quien se trabaje. Y para luchar contra los deshaucios también. Se construye así un creciente tejido asociativo capaz de suplir el papel tradicional de sindicatos (íntimamente unidos a la lucha de clases) y las clases en si, construyendo una nueva forma de enfrentarse a los problemas que el poder plantea.

Que sea efectiva o que haya que buscar otro camino es algo que sólo el tiempo puede decir.

Costán Sequeiros Bruna

 Y tú, ¿qué opinas de las clases sociales?

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