En estos días, parece que los mercados quieren muchas cosas, exigen sacrificios, y demandan cambios. Y yo que aún no me he encontrado con ningún mercado para preguntarle qué le gusta…
Ahora en serio. Los “mercados” son agentes económicos, y no son agentes unitarios sino millones de individuos cada uno actuando según sus percepciones e intereses. No tienen una agenda, no tienen una voluntad común, no actúan de modo planificado. Y sólo quieren una cosa: ganancias. Esos actores se han metido en la bolsa para hacer dinero, aquí o allí, son los beneficios lo que les mueve.
Por tanto, cuando los políticos dicen “los mercados demandan esto o aquello”, lo que realmente quieren decir es lo contrario: que esta o aquella medida va a aplacar la voracidad de los mercados. A los mercados les interesa mantener la prima de riesgo alta: significa que por cada dólar que invierten en España reciben más dinero a cambio de arriesgarse a que España sea incapaz de devolver el préstamo. A ellos les gusta esta situación.
Ellos no demandan ningún cambio, los políticos esperan que el índice de riesgo que supone invertir en España disminuya con una medida u otra, de modo que se aplaquen los mercados y el préstamo vuelva a estar a una tasa razonable de interés.
Por tanto, las demandas y medidas no son ninguna cosa objetiva: no hay una lista de cosas a hacer para solucionar la crisis. Al contrario, es todo un juego de subjetividades: el Gobierno, la UE, el FMI, etc. creen que esto podría servir, los mercados por el otro lado creen que esta es la tasa de riesgo o que esto es lo que es adecuado presionar. No tienen bases objetivas, más que las tasas económicas que, ciertamente, fueron peores en otros momentos, y que no importan tanto en sí mismas sino en cómo se usan: porque ambos lados manipulan los números para defender sus intereses.
El análisis de la economía es una ciencia, basada en hechos y datos concretos y observables. La predicción de las consecuencias de unas medidas u otras es un arte mucho más que una ciencia, ya que las subjetividades nunca son cuantificables. Unas medidas cambian unos indicadores, y la gente luego decide lo que eso significa, y qué implicaciones tienen. Y, sobretodo, si con ello pueden hacer dinero, que es de lo que va todo.
Así que cuando alguien diga “los mercados quieren esto”, recordad que ellos no existen. Solo son muchas personas buscando hacer dinero, otros interpretando lo que hacer para bajar el riesgo (y con ello los márgenes de beneficios) y todos jugando a entenderse y no entenderse a la vez.
Costán Sequeiros
Este es el comentario del antiguo blog:
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