Detroit: Become Human es un gran juego de toma de decisiones, una experiencia cinematográfica donde el jugador tiene que escoger y decidir en cuestiones muy interesantes sobre las que vale la pena reflexionar. Elementos como la filosofía, la identidad, la confianza, el amor, los sentimientos, el miedo… en resumen, como dice el propio subtítulo del juego, lo que nos hace ser humanos. Y nos lo hace vivir desde el otro lado del telón, desde el colectivo que, en el universo del juego, teóricamente no tiene nada de todo eso: los androides.
Pero, más allá de su buen guión, de los momentos dramáticos y de tensión, de la buenísima banda sonora o el excelente trabajo de los actores, Detroit: Become Human plantea algunas cuestiones sociológicas y sociales muy interesantes, sobre las que vamos a hablar aquí. Y sobre las que vale la pena jugarlo para enfrentarse “dentro de la piel de los personajes” a esos puntos y conflictos.




Esta pregunta parece una tontería, cualquiera podría responder rápidamente: “¡La acción del pueblo!” Pero quizás otra diría “¡lo que hacen los políticos!” y el tercero tal vez optase por un “esa cosa aburrida de los telediarios antes de los deportes”. Entender qué es la política es algo mucho más complejo de lo que aparenta, y voy a iniciar la explicación por la traducción de tres términos del inglés tal como la explica el Profesor Subirats en el primer vídeo del comienzo del curso online sobre políticas públicas y democracia. Vamos a verlo, porque en castellano el término política es demasiado amplio y ambiguo: