A menudo, parece que la sociología sólo sirve para sesudos textos que analicen sistemas políticos, instituciones, dinámicas demográficas, o colectivos desamparados. Sin embargo, hay muchas más caras de la sociología, una por cada faceta que tiene la sociedad. Ya os colgué hace un tiempo un ejemplo de la sociología de la literatura con mi análisis de Neuromante, hoy toca hacer sociología de la televisión y de la literatura a la vez, echando un ojo a Juego de Tronos.
Empezaré admitiendo, para que no haya confusiones, que no soy muy amigo de Juego de Tronos. Dejando de lado su estilo narrativo y otras cosas, una de las razones principales de ello es que sociológicamente es un sistema político imposible. No se ha dado en la historia, y no se ha dado por razones importantes. A primera vista, parece un reflejo más o menos mágico de la Edad Media, pero falta uno de los pilares principales que explica la Edad Media.