En el mundo de las ciencias sociales, desde tiempos de Ockham y su famosa navaja, lo que impera es la verificación por medio de la verosimilitud, la lógica y los datos. Lo malo de los datos es que en ocasiones pueden ser equívocos, o difíciles de obtener, lo cual hace que algunos se decanten más por la verosimilitud y por la lógica.
Category: Reflexiones personales
Este es el cajón de sastre para aquellas ideas que tengo, y que sin embargo no se refieren directamente a la teoría de ningún autor ya establecido o me cuesta categorizar en otro sitio. En cierta medida, esta es la categoría hecha más desde mi.
El Subsistema Económico
El más conocido por todos nosotros, y el que a menudo se confunde con el sistema mismo, todos podéis decir su nombre conmigo: el capitalismo. En efecto, el a menudo considerado como elemento central de nuestra sociedad no es más que uno de los subsistemas pilares de la misma. Pero, quizás, es el que más éxito ha tenido a la hora de volverse hegemónico en el mundo.
El Subsistema Militar
El brazo armado es la clave del poder político, y en el mundo actual se articula básicamente en torno al bloque de la Hegemonía de Estados Unidos y toda la constelación de grupos, asociaciones, y alianzas que esta ha construido, desde la ONU a la OTAN, o muchas otras. Permanentemente en desarrollo tecnológico y de cantidad, el ejército de los Estados Unidos posee un renombre que, ciertamente, no se corresponde con su efectividad en el campo de batalla, pues como alguien dijo “los marines sólo son capaces de conquistar territorio allí donde el enemigo ya ha sido destruido por los bombardeos previos”. Y, en efecto, la historia no deja a la infantería americana en muy buen lugar, quizás descontando las rentas de las que viven de la Segunda Guerra Mundial.
Es curioso, siempre nos han enseñado que la sabiduría se encuentra en las palabras. Refranes, libros, “películas filosóficas”,… cualquiera de ellos es visto como una fuente de sabiduría en si mismo, portador de una verdad universal que cualquiera que se exponga a ella captará inmediatamente de un modo puro y total. Y aunque eso es cierto, la verdad es un poco más compleja y extensa.
Continuando con el post anterior: toda fuerza aplicada genera, al mismo tiempo, “una fuerza de igual intensidad y dirección opuesta sobre el mismo objeto”. Esa es una ley básica de la dinámica en física, probada un millón de veces, pero también puede ser una ley del funcionamiento social si la reformulamos:
Todo movimiento social y cultural genera, con el tiempo, un movimiento opuesto de creciente fuerza a medida que el primer movimiento va ganando poder y moldea la sociedad bajo sus estándares.
En el mundo contemporáneo, la forma que toma el subsistema político es el de una supuesta democracia. Y digo supuesta porque “demos” es pueblo, y “cratia” poder… y el pueblo está actualmente lejos de tener el poder.
Retomando el punto del anterior post, finalmente llegamos a nuestros tiempos. El pan-arabismo ha muerto (o da sus últimos estertores), y en su lugar cada vez más gobiernos árabes renuncian a las vías intermedias que podrían llevarlos a la Democracia (o, mejor dicho, al sistema de gobiernos basados en elecciones de “representantes del pueblo”) y se inclinan cada vez más por el integrismo. Si hasta la caída del Imperio Otomano los árabes en gran medida se habían quedado socialmente atascados desde el siglo XV, ahora van marcha atrás en muchos de sus países (que no todos, ojo): más sometimiento de la mujer, más fe, menos ciencia, menos educación real fuera del Corán, más dominación (si es que realmente la dominación varía en su cantidad, y no sólo en su forma), más hostilidad con Occidente (de nuevo, la Yihad malinterpretada no como búsqueda interior o guerra defensiva, sino como conquista), etc.
La Pregunta de la Verdad
Todos fantaseamos con el poder de leer las mentes de los que nos rodean, con saber sus pensamientos, sus deseos, y sus opiniones. En el fondo, creemos que con ello podríamos conocernos más y conocerlos a ellos. Pero lo cierto es que eso sería más próximo a una maldición, porque las mentes de las personas contienen cosas que no deseamos saber de ellas… y de nosotros mismos.
Hago, Luego Pienso
La concepción habitual de la mente humana parte de que los seres humanos tenemos un conjunto de ideas, y que actuamos de acuerdo con ellas. Pero lo cierto es que eso no siempre es así, sino que es una carretera bidireccional.
¿La Gran Amiga H?
Es curioso, la Bomba de Hidrógeno, Bomba H, o Bomba Atómica (como queráis llamarla) ha sido desde su aparición el mayor terror que la raza humana ha conocido. Y de hecho, estaba diseñada y planeada sobre todo para eso, no es un arma de uso real, sino de terror.
Más Allá del Humano
Lo cierto es que este post es más una pregunta que una respuesta o idea, al contrario de lo que suelo intentar hacer. Algo al respecto de esto ya iba implícito en el post anterior, pero vamos a meternos más a fondo. Es una vieja teoría mía, en la que pensé durante mi tercer año de carrera, y que bauticé como “Homo Post-Naturalis”; osea, el hombre posterior a la naturaleza.
Siempre he pensado que, políticamente, Estados Unidos es como un niño pequeño con un arsenal nuclear: busca extender por el mundo su doctrina y su forma de ver las cosas, y cuando se le riñe o lleva la contraria, se enfurruña y echa mano de su arsenal. Creo que ya expliqué por aquí en alguna ocasión cómo Estados Unidos es Marte y Europa es Venus.
¿El Mundo Existe?
Acabo de ver los Crimenes de Oxford, y el comienzo me ha hecho recordar un debate tradicional en la filosofía, que pretendo ver si se puede trasladar a la sociología (a ver qué sale de este experimento).
El Gran Equilibrio
Me encuentro haciendo un trabajo sobre la crisis del estado del bienestar, cuando de pronto me cruzo con una idea bastante interesante en el libro “Crisis y Futuro del Estado de Bienestar” de Rafael Muñoz de Bustillo y otros autores. Pues bien, ellos disocian dos conceptos que suelen ir unidos siempre como algo natural. Ponen de un lado capitalismo, y de otro estado de bienestar democrático. Y no sólo eso, sino que los sitúan en una balanza, uno opuesto al otro.
Pensamos a Saltos
Hablando con el bueno de Anarkyn me ha expuesto la siguiente teoría, heredera de las posiciones de Bourdieu. Básicamente, la teoría parte del punto de que la gente no está continuamente pensando en lo que piensa. Suena retorcido, pero en realidad es sencillo. Cuando vas por la calle, no vas pensando “me gusta el pollo, odio la Iglesia, me quejo de mi vecino…”. Por mucho que esas sean nuestras opiniones al respecto, lo cierto es que, durante la mayor parte del tiempo permanecen latentes en nuestro interior.