
Hoy comparto con vosotros el segundo capítulo que Héctor Puente y yo tenemos en el libro “La Unión Europea: Claves y desafíos actuales del proyecto común”. El libro fue editado por Marcin Roman Czubala y publicado por la editorial Sindéresis.
En este capítulo, recorremos el papel de una buena gobernanza tal y como la propia Unión Europea la define, contrastándola con la realidad que encontramos en el interior de la Unión. Y comparamos eso con la situación global, donde el conflicto entre las potencias está dejando escenarios de cambio en los equilibrios de poder, desde el Brexit a la pérdida de poder de Estados Unidos, el crecimiento de China o el papel ambivalente de Rusia. Todo ello para entender en qué lugar se encuentra la Unión y qué retos y oportunidades tiene por delante a la hora de construirse como un actor de importancia y éxito, al igual que proteger los intereses de los ciudadanos europeos.
Academia: El rol de la Unión Europea en la gobernanza global
Costán Sequeiros Bruna
Y tú, ¿qué opinas del rol que la Unión tiene en la gobernanza global?






Hoy comparto con vosotros el
El Gobierno mueve sobres llenos de dinero sin que nadie pueda hacer nada. La Iglesia tiene Cardenales que se envenenan unos a otros y desfalcan dinero del Banco Vaticano. Las empresas se mueven a paraísos fiscales. Y esto todo y más, ¿cómo se detiene? La clave para ello es lo que en inglés se llama accountability, que podría traducirse como “rendir cuentas” y que significa, a grandes rasgos, que haya alguien ante quien todo el mundo tenga que responder.
O eso reza el dicho, que en días como hoy, parece más cierto que nunca. El escándalo de Petraeus en Estados Unidos, la financiación ilegal de Sarkozy en Francia usando dinero de Gadaffi, el uso indebido de dinero del Parlamento británico para comprar pisos en Reino Unido, los infinitos casos de Silvio Berlusconi… podríamos seguir eternamente. Lista a la que hoy hay que añadir el grado completo de corrupción que ha aparecido en la cúpula del PP. ¿Por que lo hacen, cuando ya lo tienen todo?
Hace tiempo que se debate acerca de lo que implicaría la implementación de medidas electrónicas en la democracia: beneficios, cambios y peligros. Sin embargo, el proceso avanza en paralelo al debate. Así, en las últimas Elecciones Generales en España, en diversos Colegios Electorales de la Comunidad de Madrid se emplearon ordenadores para ayudar en el recuento de votos, el control de incoherencias, etc. Y resultó ser una herramienta muy útil para el buen funcionamiento de esas mesas electorales. En el caso español, la legislación no permite ir más allá. Pero en Estados Unidos, por ejemplo, existen Estados donde se permite votar directamente de modo electrónico en unos cajeros específicos.
La sociedad civil ha estado siempre en conflicto con el poder, remodelándolo en la medida en que ha podido. Las huelgas y manifestaciones han sido sus armas principales, como lo han sido posteriormente los sindicatos, las ONGs, o los movimientos sociales más o menos establecidos.
Miremos a donde miremos, los escándalos de corrupción se suceden. Bankia, la financiación de Sarkozy, Gürtel, los casos de plagio en Rumanía, etc. Y parece que, junto a esto, nos encontramos con una justicia incapaz de actuar, desde la pérdida de rango de juez de Garzón a los bloqueos del PP a cualquier tipo de investigación en el Parlamento.